Soy el amo de mi destino y el capitán de mi alma.Sí, por mucha rabia que te de soy yo, y siento decir que en el concepto de "yo" no están incluidas tus recomendaciones, ni tus ayudas enmascaradas de cariño y demás sentimientos de solidaridad que lo único que están es ansiosas por poder decidir algo, aunque sea en una vida ajena ya que en la suya propia no pudieron.
¿Que culpa tenemos nosotros de que a vosotros no os dejaran elegir? Si dejo que algo me influya, que algo o alguien decida por mi, le habré regalado mi vida, le habré regalado lo único que me hacía ser persona: mi capacidad de tomar decisiones...
Lo cual me recuerda a cierta campaña contra las drogas que tenía un eslogan que decía "no dejes que decidan por ti"... Eso, es, No les dejes decidir por ti.
Todos los que te quieren "guiar", "enseñar sus respuestas" y demás mentiras, son la peor droga que puede existir, ya que, se meten en tu cabeza, inhiben tus sentidos, te ciegan la razón, te obligan a hacer cosas que seguramente no harías, hasta acabar destruyendo la línea que nos separa de los animales, nuestra capacidad de poder decidir; para acabar convirtiéndote en ellos, en una oveja más del rebaño con un único anhelo: volver a ser, volver a tomar una decisión, esperar a encontrarte con una persona ingenua a la cual poder robarle su vida.
Queridos señores y señoras con complejo de cocaína/heroína/éxtasis/alcohol:
Lo siento, me gusta vivir, no os consumo.
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