Al igual que en la amistad, el enamorado no espera ninguna recompensa por sus sentimientos. No espera ningún galardón, no idealiza a la persona que ha escogido, ya que conoce sus defectos y los acepta así, con todas sus consecuencias. Esto sería el ideal. Ahora falta saber si vale la pena vivir, si vale la pena ser hombre sin un ideal así. ¿Qué valor tiene una relación si sólo amamos en la otra persona sus virtudes, su fidelidad, su firmeza? ¿Qué valor tiene cualquier amor que busca una recompensa?
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